Durante los últimos años la
sociedad venezolana se ha visto en presencia de una cantidad impresionante de
problemas ante los cuales la protesta se ha convertido prácticamente en una
costumbre. Por un lado los problemas que incentivan la protesta son cada vez
más. Y por otro lado, las formas de protesta no parecen ser demasiado
productivas ya que cada problema requiere una extensa cantidad de protestas
para ser tomado en cuenta y solucionado. Tomando en cuenta lo descrito, notamos
la necesidad de un nuevo mecanismo de protesta en nuestra sociedad; uno que
logre dar a conocer mejor la gravedad del problema que genera descontento en la
sociedad.